Especial Navidad: Gremlins para Horrorama

Gremlins es una película de 1984 dirigida por Joe Dante y producida por Steven Spielberg, con guion de Chris Columbus, al que luego conoceríamos por la saga de Solo en casa o Harry Potter. Pocas criaturas son tan icónicas como el pequeño y adorable Gizmo y sus malvados y destructivos primos de aspecto reptiliano. Por si fuera poco es una verdadera película navideña, perfecta para reír (y aterrorizarse) en estas fechas.

Estas traviesas criaturas tienen su origen en las historias de los aviadores británicos de la II Guerra Mundial, que achacaban los fallos en cazas y bombarderos a pequeños seres que mordían los cables e interferían con el equipamiento cuando nadie les veía. Sería Roald Dahl, autor también de Charlie y la fábrica de chocolate y Las brujas, el que haría popular el término con su libro para niños Los gremlins.

Sin embargo los gremlins que todos conocemos no son nada infantiles. De hecho, en la trama original que barajaban Dante, Spielberg y Columbus se los presentaba como seres mucho más violentos que lo que terminó viéndose en pantalla. En algunas escenas nunca rodadas, Stripe y los suyos no solo mataban al perro del protagonista sino que decapitaban a su madre y lanzaban su cabeza rodando escaleras abajo. Supongo que los productores pensaron, con razón, que se llevaba la historia demasiado hacia el terror y menos hacia la comedia negra. Aun así los pequeños bichos verdes tienen bastantes muertes a sus espaldas.

Personalmente me gusta Gremlins porque es una película con todos los ingredientes y el esquema clásico de los 80: unos personajes adolescentes que viven en un idílico pueblecito americano y deben enfrentarse a una inesperada amenaza monstruosa. El ritmo es perfecto, desde el descubrimiento del mogwai en la tienda del barrio chino, pasando por las tres reglas, los gremlins "malos" y su evolución, hasta degenerar en el sangriento caos final... Un trabajo magistral del director Joe Dante, que no por nada es el director de otra de mis favoritas: Piraña.

Gremlins en Horrorama
Si queremos utilizar a nuestros queridos amigos verdes en Horrorama, el máster debe tener el cuenta que cualquier elemento sorpresa se ha perdido. No hay ningún jugador que no conozca a los gremlins ni sepa de qué son capaces. Por tanto nos podemos saltar la presentación de nuestro Gizmo, las reglas y demás, e ir directamente al punto fuerte. La mejor forma de plantearlo es no adelantar nada de la trama y enviar al grupo a investigar una serie de muertes inexplicables, siempre en fechas navideñas y siempre en el tradicional pueblo americano. Se pueden dar algunas pistas, con huellas de pisadas y figuras diminutas moviéndose en las sombras, además de los cadáveres, que tendrán marcas de mordiscos y garras. Lo más importante es que las víctimas hayan sido asesinadas de maneras grotescas y brutales, por ejemplo empujados sobre una sierra de carpintería, atropellados por un quitanieves...

Cuando los jugadores se topen finalmente con los gremlins deben estar en inferioridad y los seres habrán preparado trampas de todo tipo, manipulando sus frenos, cortando el árbol de navidad del centro de la plaza para que les aplaste, etc. El enfrentamiento debe ser sangriento y desigual, los monstruos son vulnerables pero son muchos. Queda de su cuenta idear una forma de acabar con todos a la vez, aprovechando su ansia por la comida basura o lo fácil que se distraen con la música y las películas. También es un añadido interesante crear un líder, nuestro propio "Stripe" que sea mucho más listo que el resto y suponga un reto adicional al final.

Gremlins: Pequeños, verdes y destructivos, harán todo lo posible por convertir la vida de los humanos en una pesadilla. ¿Tu coche hace un ruido extraño? Quizá sean ellos...
FIS 1 MEN 3 PER 1, Drama 3
Ataques: Garras (Herida Leve), Mordiscos (Herida Leve), Cuchillo (Herida Leve), Bate de béisbol (Herida Seria), Hacha (Herida Seria), Motosierra (Herida Grave), Pistola (Herida Leve)
Especial: +3 a cualquier tirada de sigilo, +1 a Drama por cualquier muerte macabra o creativa. Se les puede distraer de forma momentánea con comida, música, cine, televisión o similares.