Vampiros vs. el Bronx (2020)



En 1995, Eddie Murphy ya recorrió las calles de Brooklyn como vampiro. No resultó demasiado bien. Ahora los chupasangres han vuelto, esta vez para visitar el Bronx. Se suele decir que quien no recuerda los errores del pasado está condenado a repetirlos.

Vampiros vs. el Bronx es un poco como su cartel promocional, un batiburrillo ecléctico que trata de emular a otras películas de terror-comedia sin saber muy bien cómo hacerlo. En su escasa hora y media nos encontramos multitud de referencias a la literatura de vampiros, una trama archiconocida y un grupo de chavales que son una copia poco disimulada de los de Stranger Things, porque si no hay otra forma de lograr enganchar al espectador, al menos que todo suene lo más familiar posible.

Podría defender esta película diciendo que es de serie B, pensada para pasar el rato sin complicaciones, pero creo que no sería justo con esa categoría. Vampiros vs. el Bronx tiene medios para aspirar a algo mejor pero no se atreve a jugar a la parodia, ni siquiera a la comedia, y mucho menos al terror. Los vampiros están caracterizados de una forma que ya era ridícula en Buffy, cazavampiros, las bromas se lanzan y se agotan rápidamente, y las referencias a la literatura parecen forzadas y fuera de lugar. Quizá podríamos creernos esta suma de despropósitos en los 80, pero no ahora, sobre todo cuando el director trata de colarnos de fondo una denuncia sobre la gentrificación de los barrios pobres.

Sé que muchas de mis reseñas terminan diciendo "para fans del género" o "para pasar el rato", pero en este caso no puedo hacer ni una cosa ni la otra. Para mi gusto es una pequeña decepción, un intento de sumarse a la moda de la nostalgia ochentera sin haber hecho los deberes y sin saber bien qué es lo que hacía funcionar esas películas. El bajo presupuesto no es una excusa, y tampoco que la historia esté trillada. Hace poco hablaba aquí de Madre oscura, cuyos autores entendieron mucho mejor cómo deben ser las cosas. Resumiendo, mejor ahorrarse noventa minutos y dedicarlos a ver esa o un clásico de entonces.

Comentarios

  1. La gentrificación cuando se hace por artistas pijos en el Soho/SoHo es una "performance". Una nueva palabra, gracias.:D

    ResponderEliminar

Publicar un comentario