Espadas y escudos (II)
Para empezar, cinco centímetros de acero son suficientes para matar a una persona, dependiendo de dónde entren, así que la primera norma es no tomarse el combate a la ligera. Quizá en los juegos "heroicos", en los que una espada es incapaz de matar de un golpe a un jugador de cierto nivel, esto sea más fácil de olvidar, pero tengámoslo en mente de todas formas. En la vida real nadie desea ser herido, ni siquiera por un cortaplumas. No hay que pretender que el sistema refleje la letalidad de una navaja, pero al menos debería transmitir sensación de peligro en todos los enfrentamientos. Una buena forma de hacerlo es con un sistema de críticos o golpes apuntados eficiente.
Como consecuencia lógica, el golpe de un contrincante normalmente debería bloquearse o esquivarse. Para lo primero, históricamente se han empleado escudos pero también todo tipo de armas usadas en la mano opuesta. La serie "Conquest" del Canal de Historia, en su capítulo dedicado a las armas de lo